No cuentan con servicio de archivo, sus fondos documentales son producto de la acumulación de materiales de gestión diaria y se expurgan con regularidad, los escasos fondos que han sobrevivido, de considerable antiguedad, se hallaron casualmente en la lonja que utilizan como depósito de mercancia, un almacén de libros donde estas tipologías registrales pasaron desapercibidas bastante tiempo. La escasez de espacio físico disponible tanto en la diminuta área administrativa de la librería como en el atestado almacén de mercancias determina la necesidad de eliminar la mayor parte de las series cada cuatro o cinco años. Nuestros informantes aseguran que un negocio de librería no acostumbra a generar un volumen significativo de otros materiales que no sean los contables y los relacionados con facturación y pedidos. Esta librería cuenta con un personal numeroso pero su gestión esta externalizada en una empresa de asesoría, por lo que las tipologías que conservan relacionadas con esta posición son escasas. En el pasado la gestión de las librerías generaban fondos aún más escasos por sus modalidades tradicionales de funcionamiento.

La librería ocupa los bajos de dos edificio de viviendas y locales comerciales en el casco antiguo de la capital, no están comunicados entre sí, los fondos documentales se reparten entre la oficina administrativa habilitado en el nº 1 y un almacén situado en la C/ Altamirano, contigua a la sede de la empresa.

Metros cuadrados de depósito:

20

Metros lineales:

14

Número de puestos de la sala de investigadores:

0

Volumen de documentación

• 18 metros lineales

Servicio de fotocopias.